La Serie de Japón 2018 registró el 1er empate que se ve en la final desde 2010
El primer partido de la edición 2018 de la Serie de Japón, disputado este sábado en el Estadio Mazda de Hiroshima entre los Halcones de SoftBank y los Carpas de Hiroshima, terminó empatado 2-2 luego de 12 entradas y 4 horas y 38 minutos de juego.
No se trata de la primera vez que algo así ocurre en la gran final del béisbol japonés, ni tampoco será la última, porque como ya lo habrán deducido los empates también están permitidos en la serie decisiva de la NPB.
La regla es la siguiente: si ninguno de los dos equipos gana el partido en los primeros 9 episodios, entonces se disputan entradas adicionales hasta un máximo de 12, momento tras el cual se da por terminado el encuentro si el marcador se mantiene igualado. Por mucho tiempo, el límite fue de 15 capítulos, pero a partir de esta campaña se redujo a 12.
Adicionalmente, hay que acotar que los empates sólo están permitidos en los 7 primeros juegos, por lo que si hace falta ir a un octavo o incluso un noveno para determinar al ganador, entonces los partidos ya no podrán terminar igualados.
Esto quiere decir que la Serie de Japón no se juega al mejor de 7 partidos, sino al primero que gane 4. Uno de los dos conjuntos participantes deberá sumar 4 victorias para poder alzarse con el título, sin importar cuántos encuentros que le tome, que podrían ser hasta 14.
En teoría, si los primeros 7 juegos terminan empatados y luego hay que disputar 7 más para determinar al ganador, entonces la serie podría llegar a 14 partidos. Las posibilidades de que algo así ocurra son casi nulas, pero de existir, existen.
Personalmente, los empates en el béisbol japonés no nos molestan, pero sin duda los eliminaríamos en la postemporada. Durante la serie regular tienen el valor de evitar que se extiendan demasiado partidos que son intrascendentes, pero en los playoffs y la final representan una injusticia y una pérdida de tiempo.
Los empates existen en la NPB por la sencilla razón de que en Japón la mayoría de los fanáticos (algo así como el 95%) se trasladan a los estadios en trenes y éstos dejan de funcionar a la medianoche, por lo que un partido que se extienda demasiado significaría que miles de personas no tendrían cómo regresar a sus casas.
Sin embargo, teniendo en cuenta la importancia de los playoffs y la final, podría hacerse el esfuerzo de tener autobuses disponibles para ayudar a los fanáticos a regresarse a sus casas en caso de que un partido se extienda más allá de la medianoche.
De cualquier forma, como los empates realmente no ocurren muy a menudo en la Serie de Japón (sólo van 8 en casi 70 años de historia), pues lo más probable es que las reglas de la NPB se mantengan tal cual como están por mucho tiempo más.
El empate entre Lotte y Chunichi de 2010 se mantiene hasta ahora como el juego más largo de la final (5:43)
El juego del sábado entre Hiroshima y SoftBank, por lo tanto, se convirtió en el octavo empate que se registra en la historia de la Serie de Japón y el primero desde la edición 2010 entre los Marinos de Lotte y los Dragones de Chunichi.
En aquella ocasión, ambos clubes disputaron en el Nagoya Dome el sexto juego de la final con Lotte en ventaja de 3-2 en la serie. Luego de 15 entradas y 5 horas y 43 minutos, el partido terminó igualado 2-2 y se convirtió en el más largo de la historia del evento.
El dominicano Tony Blanco se fue de 6-1 en ese encuentro y remolcó una de las 2 carreras de Chunichi, mientras que su compatriota y compañero de equipo Máximo Nelson retiró en fila a los 6 rivales que enfrentó en 2 episodios de relevo.
Lotte terminó derrotando a Chunichi en el séptimo juego, disputado al día siguiente en el mismo escenario, para capturar el cuarto título de la Serie de Japón de su historia y su segundo en 5 años.
El primer empate que se dio en la final ocurrió en la edición de 1953 entre los Gigantes de Yomiuri y los Halcones de Nankai (hoy Halcones de SoftBank). El tercer juego de esa serie terminó igualado 2-2 tras apenas 8 episodios y 2 horas y 21 minutos de acción.
Yomiuri terminó superando 4-2 a Nankai en 7 juegos para ganar la tercera corona de su historia y su tercera consecutiva sobre el mismo rival.
El segundo empate ocurrió en la serie de 1957 entre los Leones de Nishitetsu (hoy Leones de Seibu) y los Gigantes de Yomiuri. El cuarto partido de esa final, que tuvo lugar en el Estadio Korakuen de Tokio (antecesor del Tokyo Dome), terminó igualado a cero carreras tras 10 episodios y 3 horas y un minuto de juego.
Nishitetsu “barrió” 4-0 esa final en 5 partidos para alzarse con el segundo título de la Serie de Japón de su historia.
El tercer empate de la final se registró pocos años después, en la edición de 1962 entre los Voladores de Toei (hoy Luchadores de Nippon Ham) y los Tigres de Hanshin. El tercer encuentro, celebrado en el Estadio Meiji Jingu de Tokio, culminó igualado 2-2 tras 14 capítulos y 3 horas y 44 minutos de acción.
La serie terminó extendiéndose a 7 juegos y fue ganada 4-2 por Toei, que cosechó el primer título de su historia.
Hubo que esperar 13 años más para presenciar otro empate en la Serie de Japón y para compensar las cosas la final de 1975 nos brindó nada menos que 2 partidos que terminaron en tablas.
Los Carpas de Hiroshima y los Bravos de Hankyu igualaron 3-3 tras 11 entradas y 4 horas y 29 minutos en el primer juego, que tuvo lugar en el Estadio de Nishinomiya. El venezolano Robert Marcano, que estaba debutando en la NPB ese año, se fue de 5-2, con un jonrón, un doble y 2 empujadas, para ayudar a la causa de Hankyu.
Luego, el cuarto encuentro de la serie, disputado en el Estadio Municipal de Hiroshima (antecesor del Estadio Mazda), culminó con marcador de 4-4 tras 14 entradas y 4 horas y 49 minutos de acción. Marcano se fue de 6-1 con un sencillo en ese partido.
Hankyu terminó “barriendo” la serie 4-0 en 6 partidos para ganar la primera final de su historia, que también representó el primer triunfo en la serie para Marcano.
La Serie de Japón de 1986 es, hasta ahora, la única que ha llegado a 8 juegos
La Serie de Japón de 1986, entre los Carpas de Hiroshima y los Leones de Seibu, comenzó también con un empate. Ambos conjuntos igualaron 2-2 en 14 episodios el encuentro disputado en el Estadio Municipal de Hiroshima, que duró 4 horas y 32 minutos.
Hiroshima ganó los 3 juegos siguientes para colocarse a un paso del título, pero Seibu se impuso en los últimos 4 para capturar la sexta corona de la Serie de Japón de su historia. Hasta ahora, esta ha sido la única final que ha llegado a 8 partidos.
No tenemos clara la razón por la que todos estos juegos terminaron empatados después de distintos números de entradas disputadas. Al parecer, aquel tercer partido de la serie de 1953 se dio por terminado tras 8 episodios por mutuo acuerdo entre los equipos debido a lo inclemente del clima.
Sin embargo, ese no fue el caso en el resto de los empates. El de 2010 terminó en 15 entradas porque esa era la regla en ese momento. El juego de hace 2 días culminó tras 12 episodios porque este año se bajó el límite de extra innings de la final de 15 a 12.
Lo más probable es que los otros juegos hayan terminado en esos números de entradas debido a las reglas vigentes en esos momentos, que en ocasiones establecían límites de 12 capítulos o 4 horas de juego, lo que se cumpliera primero.
Resulta curioso observar cómo Hiroshima ha estado presente en las tres Series de Japón que han comenzado con un empate. No obstante, ese dato no resulta muy alentador para sus fanáticos debido a que el conjunto rojo perdió las dos primeras de esas 3 finales.
¿Logrará por fin cambiar su suerte en la Serie de Japón 2018? Pronto lo averiguaremos. En este momento tiene ventaja de 1-0 tras 2 partidos disputados y el tercero se celebrará mañana martes en el Yafuoku Dome de Fukuoka, sede de SoftBank.
