Vie, 03 May 2024 21:58 PM

Anraku y el lado oscuro del béisbol japonés

   El reciente caso de Tomohiro Anraku, un veterano de 9 campañas en la NPB que está siendo investigado por las Águilas de Rakuten por hostigar a sus compañeros de equipo, trajo de nuevo a la luz pública el lado más oscuro del béisbol japonés.

 

Tomohiro Anraku tiene ya 9 años con Rakuten

 

   El derecho de 27 años está siendo acusado de insultar a diario a los jugadores más jóvenes del club, de sacarles dinero a través de amenazas y de forzarlos a desnudarse en frente de sus compañeros para que éstos se pudieran burlar de ellos.

 

   La gerencia del conjunto se apresuró a disculparse públicamente por lo ocurrido y a confirmar que está investigando todas las acusaciones con el objetivo de llegar al fondo del asunto. Así mismo, prometió que si el jugador en cuestión es encontrado culpable, no dudará en castigarlo severamente.

 

   Todos los equipos de la liga tienen hasta el 30 de noviembre para enviar a la oficina del comisionado sus respectivas listas de jugadores reservados, que incluyen a los peloteros que forman parte de sus planes para el futuro.

 

   Una de las herramientas que Rakuten tiene a su disposición para resolver este problema es dejar a Anraku fuera de esa lista, lo que pondría punto y final a su actual contrato en menos de una semana y lo convertiría en agente libre.

 

   Nada ha sido decidido hasta ahora, pero la gerencia está pidiendo paciencia a los fanáticos hasta que culmine su investigación y además les ruega que no se dejen llevar por los rumores que están circulando en las redes sociales, ya que los mismos no han sido confirmados.

 

   La NPB es una liga en la que este tipo de incidentes son muy poco comunes, pero lamentablemente no son únicos. Ya los hemos visto ocurrir en el pasado, incluso con más gravedad que en el caso de Anraku, y lo más probable es que los veamos suceder de nuevo en el futuro.

 

La relación maestro-discípulo es casi sagrada en el béisbol japonés

 

   La relación maestro-discípulo (Senpai-Kohai) es casi sagrada en la cultura japonesa y no sólo se puede ver en todas las áreas de la vida social (escuelas, oficinas, equipos deportivos, etc.), sino que su utilización es fomentada en todos sus niveles.

 

   Así, es absolutamente normal que cuando un grupo de jugadores novatos entra a un equipo de béisbol, el manager del mismo le asigne un mentor (Senpai) a cada uno de ellos (Kohai) para guiarlos en su adaptación a su nuevo estilo de vida.

 

   En la mayoría de los casos esa relación es muy respetuosa y no sólo logra con éxito el objetivo de entrenar apropiadamente al discípulo en cuestión, sino que además crea una estrecha amistad entre ambos peloteros que durará por el resto de sus vidas.

 

   Sin embargo, en ocasiones aparece una persona que saca provecho de su posición de mentor para hostigar y maltratar a su discípulo, la mayoría de las veces a través de abusos verbales, pero también por medio de abuso físico.

 

   Un ejemplo reciente es el del slugger Sho Nakata, quien fue básicamente despedido de los Luchadores de Nippon Ham en 2021 luego de realizar comentarios racistas hacia su compañero Chusai Mannami que fueron capturados en un video que se hizo viral en las redes sociales.

 

   “Tú pasas mucho tiempo en la cama solar” le dijo en el dugout, haciendo referencia a la piel oscura del joven jugador, cuyo padre es de la República Democrática del Congo. Los otros peloteros presentes dijeron inmediatamente que se le había pasado la mano con el comentario.

 

Nakata fue básicamente expulsado de Nippon Ham por hostigar a sus compañeros

 

   Pero Nakata no se conformó con eso. En un incidente separado empujó agresivamente a un compañero no identificado y fue necesaria la intervención de otros para evitar una pelea mayor. Al final, la gerencia decidió suspenderlo y luego lo terminó enviando a los Gigantes de Yomiuri a través de un canje.

 

   Kazuhiro Kiyohara, uno de los principales jonroneros en la historia de la NPB, también fue víctima de ataques similares durante sus años en el béisbol colegial, a pesar de ser alto y corpulento y estar más que capacitado para defenderse por sí mismo.

 

   Su paso por la escuela secundaria fue particularmente traumático, ya que junto al resto de los novatos del equipo tenía la responsabilidad de limpiar y cocinar para los jugadores más veteranos y eso lo dejaba sin tiempo libre para descansar o divertirse.

 

   Cada vez que cometía un pequeño error era duramente castigado por los veteranos, que en ocasiones lo golpeaban hasta hacerlo llorar, y la situación empeoraba aún más durante las prácticas, donde su poder al bate despertaba la envidia de sus mentores, que aprovechaban para golpearlo aún más.

 

   El estadounidense Robert Whiting, autor de varios de los libros más importantes de la historia del béisbol japonés en un idioma extranjero, explicó en una entrevista que esa relación entre veteranos y novatos no es un ejemplo de sadismo, sino que está acompañada de principios filosóficos.

 

   “En los Estados Unidos, muchos piensan que el único propósito de ir a la escuela secundaria es divertirse. Sólo después de entrar a la universidad es que comienzan a tomar sus estudios más en serio. En Japón, ocurre todo lo contrario”, explicó. 

 

Robert Whiting explica la filosofía detrás del hostigamiento en el béisbol japonés

 

   “La escuela secundaria es el momento en el que cada individuo moldea su personalidad y resulta imposible tener éxito en ese aspecto sin experimentar sufrimiento. Esa es la razón por la cual los veteranos golpean y hostigan a los novatos, para ayudarlos a experimentar sufrimiento y moldear así sus personalidades”.

 

   Ese tipo de comportamiento también se extiende a la relación manager-jugador. No es raro encontrar ejemplos de estrategas que humillan a alguno de sus jugadores enfrente de sus compañeros por haber cometido un error, o que incluso golpeen al pelotero en cuestión por ese descuido.

 

   Toshiharu Ueda, el manager que llevó a los Bravos de Hankyu a ganar 3 Series de Japón consecutivas entre 1975 y 1977, fue inmortalizado en su momento por una foto en la que aparece pateando en el trasero al receptor Hiromasa Fujita por no agacharse apropiadamente en una práctica.

 

   Obviamente, los tiempos han cambiado y ese tipo de incidentes ya no son aceptables en la sociedad japonesa, sobre todo cuando las redes sociales tienen la capacidad de convertir en un escándalo un incidente relativamente menor.

 

   No hay duda de que todavía ocurren y continuarán sucediendo en el futuro, ya que esa es una parte fundamental de la cultura japonesa, pero eso no quiere decir que no pueda controlarse la intensidad y gravedad de los mismos, de manera de no traumatizar a las víctimas.

 

   Nippon Ham, en su momento, no dudó en suspender a Sho Nakata y deshacerse luego de él a través de un canje con Yomiuri. “Él admitió que cometió un error y le pidió disculpas a la víctima ese mismo día, pero ese tipo de incidentes son inaceptables”, explicó el presidente del club en aquella ocasión.

 

Libre de hostigamiento, Mannami tuvo su mejor campaña este año

 

   No es casualidad, por cierto, que Chusei Mannami, uno de los peloteros que fue maltratado por Nakata, haya completado este año la mejor campaña de su carrera. Libre de hostigamiento, fue titular todo el año, conectó 25 jonrones y remolcó 74 carreras.

 

   Es muy probable, por lo tanto, que Rakuten siga el ejemplo de Nippon Ham en el caso de Tomohiro Anraku. Si llega a comprobar a través de su investigación que éste es culpable de los delitos de los que ha sido acusado, entonces es casi seguro que lo despida del club.

 

   El público japonés ya no acepta ese tipo de abusos y ha aprendido a combatirlos a través de las redes sociales, no sólo en el mundo del deporte sino en la sociedad en general, en especial en lo relacionado al maltrato y la discriminación hacia las mujeres.

 

   Nos tocará esperar para conocer la decisión final del equipo con respecto a Anraku, pero no mucho. La NPB publica el 2 de diciembre de cada año las listas de jugadores reservados de cada equipo y si éste no aparece en la lista de Rakuten, entonces se convertirá en agente libre y quedará desempleado.