Sáb, 27 Abr 2024 01:03 AM

¿Qué ocurre con los bateadores latinos del Pacífico?

   Si hay algo que se ha hecho evidente en este primer mes de la temporada 2022 de la NPB es que los 9 bateadores latinos que están activos en la Liga del Pacífico están atravesando un muy mal momento ofensivo.

 

Galvis ha brillado a la defensiva, pero su ofensiva deja mucho que desear

 

   A la fecha de hoy, 5 de ellos poseen un promedio inferior a .200 y de los 4 restantes sólo uno batea más de .238: el dominicano Arismendy Alcántara, quien se fue de 4-4 en el juego de ayer para aumentar su registro de .224 a .274.

 

   Le siguen en la lista el cubano Yurisbel Gracial (.238), el dominicano José Marmolejos (.237), el venezolano Renato Núñez (.215), el cubano Adeiny Hechavarría (.173), su compatriota Rangel Ravelo (.152), el venezolano Breyvic Valera (.145), el cubano Leonys Martín (.141) y el venezolano Freddy Galvis (.134).

 

   Por supuesto, si tomamos en cuenta que los 8 mejores abridores del circuito poseen todos una efectividad inferior a 2.00, que los 5 primeros están por debajo de 1.00 y que el décimo de la lista apenas está en 2.17, entonces no debería sorprendernos que los promedios ofensivos de la liga estén tan bajos.

 

   Sin ir muy lejos, el derecho veinteañero Roki Sasaki, quien viene de lanzar 17 entradas perfectas de manera consecutiva, apenas ocupa el octavo lugar de ese departamento con una efectividad de 1.50. Si él es el octavo de la lista, imagínense lo bien que están lanzando los otros siete.

 

   No obstante, cabe preguntarnos a qué se debe que los abridores de ese circuito estén teniendo resultados tan extraordinarios esta temporada. ¿Se trata simplemente de talento o de la influencia externa de algún elemento que todavía no ha sido determinado?

 

   Cuando la NPB adoptó por primera vez el uso de una pelota oficial en la campaña 2011, la introducción de la misma, cuya fabricación fue confiada a la compañía Mizuno, afectó severamente la producción ofensiva de los 12 clubes que conforman la liga.

 

   Los promedios y el número de jonrones de todos los equipos cayeron de una manera escandalosa, muchos abridores tenían una efectividad inferior a 2.00, los empates se multiplicaron como un incendio forestal y el número de juegos decididos por una carrera también proliferó de una manera sorprendente.

 

Alex Ramírez fue uno de los principales perjudicados por el cambio de pelota

 

   La gran diferencia es que en aquella ocasión el problema se hizo evidente de inmediato. Los jugadores comenzaron a quejarse de la nueva pelota desde el inicio de los entrenamientos primaverales y las pruebas realizadas poco después demostraron que éstas no rebotaban tanto como las anteriores.

 

   No obstante, eso no es lo que ha ocurrido en esta ocasión. Los 5 mejores bateadores de la Liga del Pacífico poseen un promedio superior a .300 y el décimo cuenta con un registro de .267, lo que resulta consistente con las cifras que hemos visto en ese circuito en años anteriores.

 

   Así mismo, este problema ni siquiera se ha hecho presente en la Liga Central, donde los primeros 9 bateadores están por encima de .300 y el décimo se ubica en .297 y donde sólo un abridor posee una efectividad inferior a 2.00.

 

   Ese simple hecho ya elimina la posibilidad de que la pelota pudiera estar afectando la producción ofensiva de los bateadores, ya que si ese fuera el caso ambos circuitos estuviesen mostrando los mismos síntomas y ese no es lo que ha ocurrido hasta ahora.

 

   Los peloteros tampoco se están quejando de la pelota o de cualquier otro factor externo que los pudiera estar afectando, por lo que si existe uno no está claro cuál es o cómo los ha estado perjudicando en lo que va de temporada.

 

   Puede que la zona de strike de los umpires de la Liga del Pacífico se haya ampliado, pero parece poco probable que algo así suceda sin desatar de inmediato las protestas de todos los bateadores afectados y hasta el momento no hemos escuchado ninguna queja al respecto.

 

El uso de la tecnología ha ayudado a SoftBank a convertirse en una de las grandes dinastías de la NPB

 

   Quizás se trate de la llamada sabermetría, que pudiera estar ayudando a los equipos del circuito a prepararse mucho mejor para enfrentar a sus rivales, especialmente en lo que a contrarrestar sus ofensivas se refiere.

 

   Los conjuntos de ese circuito son famosos por su filosofía progresista y por adaptarse rápido a las nuevas tendencias del béisbol profesional, incluyendo las estadísticas avanzadas, que tienen tiempo siendo utilizadas por todos.

 

   Los Halcones de SoftBank, que pertenecen a una de las compañías tecnológicas más avanzadas del mundo, han incorporado incluso la inteligencia artificial en su sistema de recolección de datos para intentar predecir cómo podrían reaccionar sus rivales en distintas situaciones del juego.

 

   Después de todo, 5 de los 6 conjuntos de ese circuito poseen una efectividad inferior a 3.00 (los Marinos de Lotte tienen la suya en 1.98), mientras que en la Liga Central 5 de los 6 están por encima de ese registro y sólo uno por debajo.

 

   Será interesante observar qué ocurre cuando ambos bandos se enfrenten en la serie de juegos interligas que arrancará el martes 24 de mayo. Si el pitcheo de los clubes de la Liga del Pacífico domina por completo al bateo de la Liga Central entonces se hará evidente que tienen la ventaja de su lado.

 

   En lo que se refiere específicamente a los bateadores latinos, hay que tomar en cuenta que 5 de ellos están debutando en la NPB y que otro está disputando su primera campaña en la liga, luego de ver acción en apenas 2 partidos el año pasado.

 

De los 9 bateadores latinos que están en la Liga del Pacífico, 5 son debutantes

 

   Eso ya explica, en parte, la dificultad que están teniendo para adaptarse a los lanzadores del circuito. No sólo nunca los habían enfrentado antes, sino que tampoco están acostumbrados a su filosofía de pitcheo, que incluye evitar la zona de strike y apelar a los lanzamientos quebrados en cuentas de 3 y 2.

 

   Sin embargo, lo que no tiene una explicación lógica es que bateadores veteranos como Yurisbel Gracial y Leonys Martín, quienes no sólo tienen tiempo jugando en Japón sino que además lo han hecho con mucho éxito hasta ahora, estén pasando tanto trabajo en la caja de bateo.

 

   Martín fue nombrado Jugador Más Valioso del mes de abril del año pasado luego de conectar 10 jonrones en ese período y fue hasta finales de año el principal protagonista ofensivo de su equipo. No obstante, este año apenas batea para .141, con un cuadrangular y 4 remolques.

 

   Gracial, por su parte, estuvo lesionado casi todo el año pasado, pero cuando jugó lo hizo muy bien y dejó su promedio en .304, con 5 vuelacercas y 15 empujadas. En esta ocasión, por el contrario, apenas batea para .238, con 6 remolques y ningún jonrón hasta el momento.

 

   No ocurre lo mismo con Adeiny Hechavarría, que si bien está en su segundo año en el circuito, en su debut no le fue demasiado bien desde el plato. En su caso, su actuación ha sido consistente con lo que había hecho en 2021, que lamentablemente no fue mucho.

 

El COVID ha obligado a posponer varios juegos de Orix y Rakuten

 

   Es probable que el par de brotes de COVID que obligaron a suspender varios partidos de las Águilas de Rakuten y los Búfalos de Orix también haya influido en los resultados que hemos visto hasta ahora. Ambos clubes tuvieron que promover jugadores de su conjunto filial para reemplazar a los titulares que fueron afectados y es probable que eso haya afectado sus rendimientos ofensivos.

 

   Sea como fuere, está claro que el pitcheo de la Liga del Pacífico está a un nivel muy elevado en este momento y que eso ha dificultado mucho el buen desempeño de los bateadores latinos que están activos actualmente en ese circuito.

 

   Esperemos que eso mejore a medida que avance el calendario, no sólo para el beneficio de los representantes hispanos sino también para el resto de los bateadores de la liga, si bien no todos han sido afectados de la misma manera.

 

   Si al final eso no ocurre y la tendencia actual se mantiene, entonces tendremos la consolación de saber que nos encontramos ante una de las campañas de pitcheo más dominantes que jamás se hayan visto en la historia de la NPB.