En una final de ensueño, Japón derrotó este martes 3-2 a los Estados Unidos en el LoanDepot Park de Miami para coronarse campeón del Clásico Mundial de Béisbol por tercera vez en su historia.
Otani poncha a Trout para darle el título a Japón
El fenómeno Shohei Otani no sólo se anotó el salvado, sino que además ponchó a su compañero de equipo en los Angelinos de Los Ángeles Mike Trout para sacar el último out del partido y darle a su país el tan esperado triunfo.
El campocorto estadounidense Trea Turner abrió el marcador en la apertura del segundo episodio con un jonrón solitario, pero Japón respondió inmediatamente con un cuadrangular de una carrera del antesalista Munetala Murakami y un remolque del jardinero central Lars Nootbaar en el cierre de ese mismo episodio.
El inicialista Kazuma Okamoto aumentó la ventaja nipona a 3-1 con un vuelacerca solitario en el cierre del cuarto, mientras que Kyle Schwarber recortó distancias con otro jonrón de una carrera en la apertura del octavo.
Shota Imanaga, el abridor japonés, se anotó la victoria luego de permitir una carrera en 2 episodios de labor. Lo relevaron sobre el montículo Shosei Togo, Hiroto Takahashi, Hiromi Ito y Taisei Ota, quienes registraron un cero cada uno.
El veterano Yu Darvish le concedió el cuadrangular a Schwarber en la parte alta del octavo y luego llegó Otani a cerrar el noveno con la ayuda de una doble matanza y un ponche a Mike Trout.
La derrota fue para Merrill Kelly, quien permitió 2 anotaciones y 3 hits en una entrada y un tercio de labor.
Otani fue nombrado Jugador Más Valioso del torneo, luego de anotarse 2 victorias como abridor y un salvado y además batear para .435 con un jonrón y 8 empujadas como bateador designado.
Japón se convierte así en el segundo equipo en ganar invicto el torneo y en el primero en ganarlo en 3 ocasiones. Los otros dos campeones, Estados Unidos y la República Dominicana, sólo lo han ganado en una ocasión.