La temporada 2024 de la NPB traerá consigo una serie de novedades que serán muy interesantes de seguir y analizar debido al impacto que podrían tener en el desempeño de cada uno de los clubes afectados y en la pelea por los títulos de liga y la Serie de Japón.
Aguilar llega con muchas expectativas a la NPB
Desde los latinos que debutarán en el circuito hasta los managers que se sentarán por primera vez en el banquillo, pasando por las estrellas que están cambiando de conjunto y las nuevas reglas de la liga, a continuación analizamos las novedades más significativas que veremos este año en Japón.
Los latinos debutantes
Al momento de escribir estas líneas, un total de 11 jugadores hispanos han asegurado contratos para debutar en la máxima categoría de la NPB en 2024. Se trata de los dominicanos Jefry Yan, Aneurys Zabala, Junior Fernández, Franchy Cordero, Albert Abreu y Jimmy Cordero, los venezolanos Jesús Aguilar, Miguel Yajure y Andrés Machado, el puertorriqueño José Espada y el panameño Javier Guerra. Quizás las firmas que más han llamado la atención hasta ahora sean las de Jesús Aguilar y Franchy Cordero, debido a la posibilidad de que puedan convertirse en grandes jonroneros en el circuito nipón. Ambos son altos y fuertes y tienen experiencia en las mayores, pero está claro que esos no son los únicos ingredientes necesarios para que un toletero tenga éxito en Japón. El dominicano Arístides Aquino, quien llegó a la liga en 2023 con la misma promesa y fracasó rotundamente en el intento, puede dar fe de ello. Con respecto a los lanzadores, las expectativas no son muchas, pero eso no quiere decir que no puedan tener éxito. Todo lo contrario, los lanzadores hispanos son los que más han triunfado en la NPB en los últimos años. Sólo nos queda esperar para saber cuáles de ellos tendrán una mejor actuación. Hay que destacar los casos de José Espada y Javier Guerra. El primero por convertirse en el primer lanzador boricua en ver acción en el circuito en 9 años y el segundo por convertirse en el tercer representante de su país en llegar a Japón en los últimos 2 años. Antes de esas firmas, la última vez que un panameño había jugado en la NPB fue en 2013.
Kokubo fue manager de Japón entre 2013 y 2017
Los managers debutantes
Tres conjuntos cambiarán de manager en la campaña 2024 de la NPB. Las Águilas de Rakuten le dieron las riendas del equipo al ex jugador Toshiaki Imae, los Halcones de SoftBank promovieron al primer equipo a una de sus estrellas de la última década Hiroki Kokubo y los Gigantes de Yomiuri hicieron lo mismo con Shinnosuke Abe. De los tres, Kokubo es el que tiene mayores probabilidades de éxito debido a que fue manager de la selección nacional japonesa entre 2013 y 2017 y arrojó buenos resultados en ese rol. En 2014, por ejemplo, ganó una serie amistosa ante un combinado de estrellas de las Grandes Ligas que incluyó un juego sin hits ni carreras combinado y luego llegó a semifinales del torneo Premier 12 de 2015 y del Clásico Mundial de Béisbol 2017. Adicionalmente, trabajó como manager del conjunto filial de SoftBank entre 2021 y 2023, por lo que ya conoce bien al equipo y a los jugadores con los que estará trabajando. Abe, por su parte, ha pasado toda su carrera con Yomiuri, por lo que conoce muy bien a la organización y sus jugadores, y además ha sido el manager de su segundo equipo desde la temporada 2020. Su personalidad introvertida no parece ser la más apropiada para el cargo que está asumiendo, especialmente en un club que está bajo la lupa de los medios de manera constante, pero eso no quiere decir que esté destinado a fracasar. Su influencia podría ser buena y generar buenos resultados para la organización. Imae, sin duda, representa la mayor interrogante de todas, ya que es el único de los tres que no cuenta con experiencia previa en el cargo. Ha estado trabajando con el club como coach de bateo desde 2020, pero no como manager, por lo que sin duda será un reto para él acostumbrarse a sus nuevas responsabilidades. No obstante, eso no quiere decir que no pueda triunfar en ese rol. El actual manager de los Carpas de Hiroshima, Takahiro Arai, superó en 2023 todas las expectativas en su primer año en el banquillo luego de llevar a sus dirigidos al segundo lugar de la tabla. Imae podría lograr algo similar si consigue la fórmula para sacar lo mejor de los jugadores que tiene a su disposición.
Las estrellas que cambiarán de equipo
Varios peloteros de reconocida trayectoria en la NPB defenderán en 2024 los colores de un equipo distinto al que nos tenían acostumbrados en el pasado. El jardinero Ryoma Nishikawa, por ejemplo, quien ha sido uno de los mejores bateadores de los Carpas de Hiroshima en los últimos años, firmó hace poco un contrato de 5 años y 10 millones de dólares con los Búfalos de Orix, por lo que lo veremos en acción con el actual tricampeón de la Liga del Pacífico este año. Sachiya Yamasaki, un destacado abridor de Orix, se declaró agente libre y decidió firmar con los Luchadores de Nippon Ham por 4 años y 5,3 millones, por lo que lo veremos lanzando en Sapporo este año. Yuito Mori, que tuvo un papel estelar como cerrador con los Halcones de SoftBank durante los últimos años de su dinastía, firmó con las Estrellas de DeNA luego de ser dejado en libertad por el conjunto de Fukuoka, así que lo veremos trabajar en Yokohama este año. El puertorriqueño Neftalí Soto también debe ser incluido en este grupo, ya que acaba de firmar un contrato de una temporada con los Marinos de Lotte luego de haber sido dejado en libertad por DeNA tras 6 exitosas campañas con esa organización. Quizás los dos cambios más significativos sean los de Hotaka Yamakawa y Sho Nakata, quienes se convirtieron ambos en noticia por protagonizar incidentes negativos no relacionados al béisbol. El primero está acusado de abusar sexualmente de una chica y fue suspendido indefinidamente por su equipo, los Leones de Seibu, quienes al final decidieron dejarlo en libertad. SoftBank aprovechó la oportunidad para firmarlo, pero esa decisión ha despertado críticas por parte del público y los medios, quienes consideran que el pelotero no se merece esa oportunidad. El segundo fue cambiado por los Luchadores de Nippon Ham hace unos años atrás luego de hacer comentarios racistas hacia uno de sus compañeros de equipo. Con esa mala reputación llegó a los Gigantes de Yomiuri, donde no tuvo demasiado éxito, y ahora intentará probar suerte con los Dragones de Chunichi, si bien parece poco probable que logre triunfar debido a su avanzada edad.
La ausencia de Yoshinobu Yamamoto se hará sentir en la NPB
Las ausencias más destacadas
Varios jugadores que marcaron una época en el pasado en la NPB ya no continuarán jugando en la liga en 2024 y sus ausencias, sin duda, se harán sentir. Yoshinobu Yamamoto, Shota Imagana, Yuki Matsui, Naoyuki Uwasawa y el venezolano Edwin Escobar forman todos parte de este grupo. Quizás la más importante de todas sea la de Yamamoto, quien viene de ganar 3 triples coronas, 3 Premios Sawamura y 3 galardones al Jugador Más Valioso de la Liga del Pacífico de manera consecutiva con los Búfalos de Orix. Su reciente firma con los Dodgers de Los Ángeles lo saca de Japón y abre las puertas de esos honores a todos aquellos peloteros que no tuvieron la oportunidad de ganarlos en los últimos 3 años. Es muy probable, incluso, que Orix no pueda repetir como campeón debido a su partida, por lo que su ausencia sin duda se hará sentir. Matsui ha sido por años el cerrador estelar de las Águilas de Rakuten, por lo que ese club deberá reemplazarlo en ese rol en 2024 después de que éste firmara con los Padres de San Diego. Imanaga, por su parte, ha sido uno de los mejores abridores de las Estrellas de DeNA de las últimas temporadas, por lo que su partida dejará un hueco importante en la rotación de ese conjunto que no será fácil de cubrir. Uwasawa cumplió un rol similar con los Luchadores de Nippon Ham y tampoco será fácil conseguirle un reemplazo en la rotación, pero para un equipo que tiene poco chance de clasificar a la postemporada ese no parece ser un problema demasiado grande. Finalmente, lamentamos la partida del venezolano Edwin Escobar, quien tuvo mucho éxito como relevista intermedio durante las últimas 7 campañas con DeNA. El club no debería tener problemas consiguiéndole un sustituto, pero sin duda extrañaremos su presencia sobre el montículo después de tantos años en la liga.
Roberto Osuna será el jugador mejor pagado en la historia de la NPB a partir de 2024
La nueva era salarial de la NPB
El mexicano Roberto Osuna se convertirá en 2024 en el primer jugador en la historia de la NPB en ganar mil millones de yenes (7 millones de dólares al cambio de hoy) por temporada, luego de firmar hace poco un contrato de 4 temporadas y 4 mil millones de yenes con los Halcones de SoftBank. Esa cifra supera a los 900 millones de yenes que ganó Masahiro Tanaka con las Águilas de Rakuten en 2021 y 2022 y a los 800 millones de yenes que ganó Tomoyuki Sugano con los Gigantes de Yomiuri en 2021, que hasta ahora habían sido los salarios más altos del circuito. Eso abre las puertas a una nueva era salarial en la liga, que por tanto tiempo había evitado pasarse de los 650 millones de yenes que le pagaron las Estrellas de Yokohama a Kazuhiro Sasaki cuando regresó de las Grandes Ligas en 2004. Esto no quiere decir que ahora muchos jugadores alcanzarán el nivel salarial del azteca en el futuro, pero sí que poco a poco se hará más común ver ese tipo de contratos, sobre todo cuando un pelotero de renombre proveniente de las mayores decida firmar con un conjunto japonés.
Las nuevas reglas de la NPB
La NPB decidió adoptar para este año varias de las reglas que fueron implementadas recientemente en la MLB, como las bases más grandes, la utilización del corredor fantasma en extra innings y la prohibición del cambio defensivo, pero como explicamos hace poco en este mismo espacio lo más probable es que esa nueva normativa no se note en el circuito. Primero, porque ambas ligas tienen la opción de no adoptar esas nuevas reglas si así lo desean, y segundo, porque incluso si las utilizan las mismas no afectarán para nada el juego ya que su objetivo es resolver problemas que en realidad no existen en el béisbol japonés.